Así como quién oye llover, oigo tus amenazas...
¿Que placer siente el enorme elefante en aplastar a un insignificante mosquito?
¿Que placer siente el enorme elefante en aplastar a un insignificante mosquito?
Pulo mis armas,
Desenvaino mi autoestima,
Apunto mis cañones
y caigo en la cuenta de que ya gané esta guerra
Desenvaino mi autoestima,
Apunto mis cañones
y caigo en la cuenta de que ya gané esta guerra
Detrás de las amenazas se esconde el cobarde, que no pasa de las palabras al hecho.
